Si eres un e-commerce y buscas anunciarte en el buscador de Google, lo más recomendable es que utilices las campañas de Google Shopping. Con este tipo de campañas conseguimos que el coste sea menor, generamos más tráfico y además, el porcentaje de conversación será mayor.
La inversión en este tipo de campañas PPC pueden convertirse en la oportunidad perfecta para incrementar el número de ventas y la rentabilidad de tu negocio. La principal ventaja que tiene Google Shopping es el impacto visual que crea en el usuario. Ofrece un servicio de compra mucho más intuitivo. De un único vistazo, el usuario puede ver la imagen del producto, su precio, el vendedor y una pequeña descripción. Gracias a su diseño simple, el usuario puede ojear el mismo producto en diferentes webs a la vez, lo que hace que la experiencia de compra sea más fácil y cómoda, ya que el comprador puede comprar los precios fácilmente.
Puede ser que ya hayas utilizado este servicio para atraer mayores compradores a tu producto y ganar de este modo clientes. El problema es que hay que seguir una serie de pasos para que nuestra campaña sea exitosa. De lo contrario, un mínimo error podría tirar por la borda todo el trabajo invertido.
Existen una serie de problemas o errores que suelen ser los más comunes al lanzar una campaña de este tipo:
Para mejorar la optimización siempre podemos incluir imágenes de alta calidad, utilizar extensiones de reseña y crear campañas en vídeo TrueView.
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